Esta obra es enfrentarse al vacío que deja una madre y comprender que nadie nos enseña a ser huérfanos. Con una voz íntima y arrolladora, Alejandro Palomas nos acoge en la intimidad del duelo y se encarna en el dolor que emana de la ausencia. Es el deseo de reencontrarse con ella, hacerse a la idea de convivir con los recuerdos y descubrir a la mujer que se esconde detrás de una madre.