Zoe vuela por encima de las leyes y las reglas. Guiada por la sed de vivir, siente que lo demás es un grotesco carnaval. Una novela apasionante y veloz, con un aliento y un fervor sostenidos hasta el final, y una voz femenina llena de matices y de frescura, de ironía y de pasión, que le sirve al autor para hacer una crítica mordaz a nuestra época, a sus ídolos de barro y a su feria de la vanidad y la avaricia.