En 1889 el experto en cálculo J. T. Maston y sus socios del Gun Club encuentran financiación en una millonaria de Baltimore para emprender un singular proyecto: cambiar el eje de la Tierra para derretir parte del Polo Norte y así poder explotar sus yacimientos de hulla. Pronto, sin embargo, para espanto del mundo entero, se conocerán las consecuencias catastróficas para el planeta.