Ciudades del Mundo Antiguo es el producto de más de veinte años de trabajo del prestigioso y premiado investigador e ilustrador Jean-Claude Golvin, el cual, gracias tanto a su profundo conocimiento arqueológico como a su extraordinario talento como ilustrador, responde con éxito al enorme desafío de reencontrarse con la arquitectura del mundo antiguo. Con el aval de las más recientes investigaciones arqueológicas, a través de sus casi 200 páginas bellamente ilustradas, descubrimos los enclaves más importantes del mundo antiguo. A la luz del más de un siglo de investigación y excavaciones arqueológicas el lector descubrirá ciudades como Babilonia, Tarraco, Cartago, Emérita Augusta o Roma, tal y como fueron en sus momentos de máximo esplendor. Sus cien reconstrucciones, en un viaje temporal de treinta siglos ?desde el 2500 a. C. al siglo V de nuestra era? hacen de este libro un recorrido visual único por aquellas ciudades y lugares de la Antigüedad cuyo nombre es casi leyenda.
Cada ilustración muestra sintetizada en una sola imagen la vastísima información que se ha publicado en miles de páginas, que a su vez es el resultado de más de un siglo de excavaciones. Por su extraordinaria composición, de un solo vistazo es posible contemplar un lugar en su contexto y comprender su historia y su desarrollo. Por ello, este recorrido convierte Ciudades del mundo antiguo en un clásico de la divulgación arqueológica y en un fantástico manual de arquitectura y urbanismo de las civilizaciones griega y romana, que al mismo tiempo nos permite soñar y reencontrarnos con la Antigüedad.
Ciudades del mundo antiguo además de ser un auténtico clásico contemporáneo de la divulgación arqueológica, y un fantástico manual de arquitectura y urbanismo de las civilizaciones griega y romana, es una hermosa obra de arte que de un solo vistazo permite contemplar cada lugar en su contexto y comprender su historia y su desarrollo.
La obra gráfica de Jean-Claude Golvin se expuso en 2006 en el Museo de Arte e Historia de Orange y en la Villa Grecque Kérylos en Beaulieu-sur-Mer.