Pep Coll ha escrito una novela a partir de unos asesinatos que trastornaron los pueblos leridanos a principios de los años cincuenta. El trabajo de campo del autor y el oficio de novelista le han permitido levantar una narración absorbente y vivaz que funciona como un mecanismo perfecto. El lector encontrará una masía centenaria y una tartana itinerante, un primer crimen imprevisto, la confesión de culpabilidad por parte de un inocente, unos investigadores policiales desconcertados, tres hermanos poco avenidos y una familia gitana que lleva una vida ambulante. La narración ?de gran fuerza visual y cinematográfica? tiene la tensión obsesiva de la avaricia, el deseo persistente de la venganza y una historia de amor a contracorriente.